25 de abril de 2020

Cosas de curas (XI)

Cosas de curas con...
Luis Eduardo Molina, delegado de Pastoral Universitaria de Ciudad Real y párroco de Daimiel

"Soy un gozoso espectador de la obra de Dios" 


Ordenado sacerdote el 29 de octubre de 2005, destaca por su silencio y prudencia. También por sus bromas y por saber escuchar. En esta entrevista se puede comprobar lo que D. Luis Eduardo dice, que es un gozoso espectador de la obra de Dios, tanto en la pastoral universitaria y juvenil como en su experiencia sacerdotal, como en la anécdota que cuenta al final. 

Uno o dos...
Canciones: "Stabat Mater" de Vladimir Martynov y "Florecer desiertos" de Prado Pérez.
Libros: La Biblia, El idiota.
Películas: La Misión, Little boy.
Santos: San Ireneo de Lyon, santa Teresa de Jesús.
Frases de la Biblia: "Para los que aman al Señor todo les sirve para el bien" (Rm 8,28). "Espera en el Señor, sé valiente, ten ánimo, espera en el Señor" (Sal 27,14).
Personajes de la Biblia: san Pablo y Marta.
JMJ u otro encuentro: JMJ Madrid 2011.
Consejos para la vida: "¿Habrá alguien que pueda suplirme?" -dijo el gran sol- "Se hará lo que se pueda" -respondió la lámpara de barro (R.Tagore).
Lugares para peregrinar: Tierra Santa.

Pregunta. ¿Qué es para usted un cura?
Respuesta. Una persona escogida por Dios para facilitar a la gente el encuentro con Él.

P. ¿Qué luz está viendo o experimentando durante la cuarentena?
R. La que nos acerca a la realidad de vulnerabilidad y sufrimiento de otras personas en el mundo -antes muy olvidadas- y la oportunidad para detenernos a plantear la vida de una forma más humana y fraterna.


P. ¿Cómo fue acogida su vocación en sus ambientes cercanos?
R. Comenté a mis padres que me quería ir al Seminario con 11 años. Ellos respetaron mi decisión, aunque me sugirieron que podría esperar a ser un poco mayor. Unas semanas después cumplimenté la inscripción y me aceptaron. Por tanto, entre la familia y los amigos lo integraron pronto.

P. ¿Qué supuso en su vida la JMJ 2011 de Madrid?
R. La visibilización de una Iglesia joven y cómo Cristo habla en los jóvenes.


P. ¿Qué frutos ha podido experimentar como delegado de la Pastoral Universitaria? 
R. La potentísima alegría y vitalidad que comparten y contagian. Todo obra de Dios en ellos. Yo, más bien, espectador gozoso.

P. ¿En qué modo le ayuda peregrinar a Tierra Santa?
R. Me acerca a las piedras vivas, los cristianos palestinos y a los consagrados - especialmente consagradas- que están sirviendo allí a tantos.

P. ¿Podría contar alguna anécdota divertida vivida como párroco?
R. Una Nochebuena fui ar cenar a casa de mi familia antes de la Misa del Gallo - a unos 24 km de mi parroquia-. Llegaba un poco tarde y con el tiempo ajustado. Para colmo, había una niebla muy densa. A la entrada del pueblo un coche delante del mío se movía despacio y con apariencia de no saber hacia dónde dirigirse. Me bajé del coche, me acerqué y pregunté a los pasajeros si necesitaban algo. Estaban buscando una carretera y no la encontraban. Les pedí que me siguiesen y les conduje con mi coche hasta el inicio de esa carretera. Al despedirme deseándoles un buen viaje y pidiéndoles que circularan con precaución -apenas se veía-, el copiloto me preguntó si yo era algo de la Iglesia. Le dije que sí, que era cura. Entonces me respondió que no creía en Dios, pero que aquello había sido un milagro.



Miguel Jiménez